There's nothing either good or bad, but thinking makes it so
There’s nothing either good or bad, but thinking makes it so - Vedast - IntelliPoker
"There's nothing either good or bad, but thinking makes it so." Shakespeare.
Desde hace meses he pasado muchas horas leyendo antiguos temas de 2+2. Se puede aprender mucho más de ellos de lo que imaginaba.
En esta ocasión, quiero hablaros de uno de los más interesantes que he leído nunca, en el que comentan muchos de los reconocidos como mejores jugadores del mundo, incluyendo el conocido por todos durrrr. En este, el creador del hilo demuestra cómo subir en NLHE con dos cartas cualquiera en el botón (que es lo mismo que ciega pequeña) a 3 ciegas en HU tiene expectativa positiva si el rival se retira al menos el 62.5% de las veces (100·2.5/4), por lo que debería de hacerse siempre que el oponente tenga esa tendencia. Eso sin tener en cuenta el valor que podamos extraer si el rival responde de otra manera que retirándose. Este es el enlace: HU Button Raising - Two Plus Two Poker Forum
¿Qué interés tiene esto? El HU es una variedad de póquer buenísima para aprender y estudiar el juego a fondo, como ya he dicho muchas veces, puesto que es la más básica de todas, donde ya encontramos todas las características de este juego.
Una vez estamos en la ciega pequeña, o botón, en HU, hemos puesto media ciega, y el oponente una entera. Si nos queda sólo lo suficiente para hacer call all-in(entre 0 y media ciega), es óptimo ver, haga lo que haga el rival, con dos cartas cualquiera. Esto es porque jugamos por un bote mínimo de 1 ciega y máximo de 2 ciegas, haciendo una inversión de entre 0 y 0.5 respectivamente, mientras que la peor mano del Hold'em, 32o, ya tiene una equity (porcentaje del bote que le corresponde, considerando el porcentaje de veces que gana y empata) del 32.303% (podéis comprobarlo con el programa PokerStove).
En el caso de que tengamos 0 ciegas, necesitamos una equity del 0% para quedarnos igual, ya que nos sale gratis ver el showdown. Y en el peor caso, que es cuando tenemos 0.5 ciegas (y entonces jugamos por un bote de 2: nuestra media obligada, la suya entera obligada y nuestra media extra que usamos para hacer call all-in), necesitamos ganar sólo un 25% de las veces. Si tenemos cantidades intermedias, necesitaremos equities intermedias para al menos no perder dinero.
Os he mostrado la situación más sencilla que existe en el Hold'em, y el origen de todo lo que es este complícadísimo juego. En este ejemplo, el oponente no interviene para nada. Sólo tenemos dos opciones: retirarnos o ver (yendo all-in, ya que no nos quedan más fichas) y las matemáticas nos han servido para ver como lo mejor es lo segundo. La psicología no tiene ningún papel. Simplemente, por como es la estructura de ciegas en Hold'em, sacamos beneficio haciendo esto, sea quien sea nuestro oponente.
En cuando el oponente ya tiene la posibilidad de hacer alguna decisión, nosotros deberemos pensar qué es mejor según su forma de jugar. Es ahí donde en juego lo que se discute en el hilo de 2+2 que he citado antes. Si nuestro oponente comete el error de retirarse al menos el 62.5% de las veces ante una subida nuestra de 3 ciegas, tendremos un beneficio automático. Si, sin embargo, este oponente reaccionara, como afirman muchos de los que comentan en ese thread que lo hará, y no se retirara tantas veces, entonces ya no ganaríamos dinero sólo de subir con dos cartas cualquiera, sino que tendremos que ver qué opción es mejor, cómo adaptarnos. La mayoría de los jugadores del hilo consideran que es mejor tirar las manos peores, principalmente porque si subimos con esas y el oponente responde frecuentemente, vamos a tener decisiones realmente complicadas y muchísima varianza.
Simplifiquemos el caso descrito en 2+2. Imaginad que tenemos 3 ciegas cada uno, somos la ciega grande y sabemos que el oponente sube a 3 ciegas (all-in en este caso) con el 100% de su rango (dos cartas cualquiera) en la ciega pequeña. ¿Qué significa esto? Que ahora tú eres la ciega pequeña, que es de 1 ciega, y él es la ciega grande, de 3 ciegas. Es decir, es como si no hubiera hablado aún, porque sabes que cuando sube tiene 2 cartas cualquiera, así que lo que hace es simplemente subir el tamaño de las ciegas. Por lo tanto, como ya pasaba antes, simplemente tenemos que calcular si nos vale la pena ir all-in ante cualquier cosa. En este caso, al invertir 2 para llevarnos 4 que ya hay puestas, es correcto ver con todo lo que tenga una equity superior al 33.33%, o sea, dos cartas cualquiera menos 42o y 32o.
Ahora compliquemos un poco más la cosa. Vayamos al ejemplo del hilo. Como sube el 100%, en la práctica somos ciega pequeña y él ciega grande, nosotros ponemos 1 y él o ella 3. Sabemos que un juego agresivo es mejor que uno pasivo, porque nos permite ganar el bote de dos maneras: cuando se retira el rival y cuando se muestran las cartas y tenemos la mejor en el showdown. Sin embargo, jugando pasivamente sólo podemor ganar de la segunda manera. Teniendo esto bien claro, subimos con dos cartas cualquiera para intentar llevarnos el bote ya. Nuestro rival piensa igual que nosotros, entonces sube otra vez. Nosotros volvemos a hacerlo. Y así hasta que alguno de los dos tiene todas las fichas dentro. Como los dos hacemos esta secuencia de subidas con dos cartas cualquiera, lo que estamos realizando es una tirada de moneda. Nadie tiene ventaja sobre el otro.
¿Es, entonces, óptimo un juego agresivo? Con un juego agresivo, contra alguien que hace lo mismo, no estamos en desventaja, pero tampoco en ventaja. Convertimos todas las manos en una guerra de subidas que acaba con un all-in entre cartas cualquiera (ya sea en limit como en no limit). Para conseguir tener ventaja, nos debemos adaptar a la tendencia del rival. Cuando subíamos con dos cartas cualquiera, lo que hacíamos era simplemente considerar como si el oponente no hubiera hablado aún, sus movimientos no dan nada de información, puesto que hace siempre lo mismo en esa situación. Es como si apostara sin ver lo que tiene. Entonces, para llevarnos el bote subíamos y subíamos hasta no tener más fichas e ir all-in. Sin embargo, si en lugar de subir con todas las manos, tiramos algunas de las peores, aunque sea sólo la peor de ellas (32o), ya tendremos ventaja cada vez que nos enfrentemos contra este oponente, que sólo se dedica a hacer la cantidad de raises necesarios a lo largo de una mano para acabar all-in (o que nos retiremos).
Por lo tanto, contra un jugador con una agresividad infinita, vamos a quedarnos igual si también somos infinitamente agresivos, pero vamos a ganar en cuando no juguemos absolutamente todas las manos. El rango concreto de manos que deberíamos jugar depende de la relación entre las ciegas y el tamaño del stack más pequeño (el efectivo). Cuanto mayores sean las ciegas respecto al stack, más grande es el rango óptimo con que subir el número de veces necesarias para acabar all-in. Este concepto es muy importante, y es por el mismo que en la práctica, los botes enormes se suelen jugar entre manos muy buenas, como AA contra KK preflop o manos muy fuertes conectadas después del flop.
¿Y eso por qué es así? Como vimos en el primer caso hipotético (tenemos entre 0 y 0.5 ciegas y jugamos por entre 1 y 2 ciegas de bote), necesitábamos una equity tan bajísima para poder ir all-in correctamente (entre un 0 y un 25%), que incluso con la peor mano, 32o, era correcto hacerlo. Sin embargo, según nuestro stack tiende al infinito, necesitamos una equity más próxima al 50%. Ahora veréis porqué.
Empezamos los dos la mano con 100 ciegas y sólo podemos hacer raise o fold, y el oponente va a hacer raise siempre, con cualquier cosa. Somos la ciega pequeña. Cuando nos metamos en la mano, es obviamente con la intención de resubir hasta acabar all-in, ya que sabemos que es imposible hacer que el oponente se retire y nos va a volver a subir con cualquier cosa. Por lo tanto, consideramos que cuando jugamos, es para ir all-in. En la práctica es lo mismo que si hiciéramos un all-in directo por todas nuestras fichas y el oponente nos viera el 100% de las veces. Estamos, entonces, metiendo 99.5 ciegas para un bote total de 200. Necesitamos, por lo tanto, una equity de al menos el 49.75% (99.5·100/200).
El rango formado por dos cartas cualquiera tiene contra ese mismo rango, un 50% de equity (como cualquier rango contra sí mismo), por lo que puede parecer correcto ir all-in con absolutamente cualquier cosa. Sin embargo, no es así. Haciendo eso no ganamos nada, sino que estamos en una tirada de moneda, no tenemos ventaja.
Tenemos que ir viendo cuáles son exactamente las manos que tienen al menos un 49.75% de equity e ir all-in sólo con esas. En este caso, se trata de {22+,A2s+,K2s+,Q2s+,J5s+,T7s+,98s,A2o+,K2o+,Q5o+,J 8o+,T9o}, que es un 49.6% de las manos totales. Veamos nuestro valor esperado en término de ciegas:
EV= 0.496·200·0.58081=57,616352
Con stacks más grandes, obviamente ganaríamos aún más en esta situación, ya que las apuestas obligatorias (ciegas pequeña y grande) van perdiendo relevancia. Por cierto, J5s tiene una equity de 49.987%, así que tendiendo al infinito se debería eliminar de nuestro rango. Todas las demás manos del rango definido anteriormente estarán presentes siempre, aunque tengamos un trillón de ciegas.
Está claro que en el “mundo real” no vamos a encontrar un oponente totalmente maníaco como el descrito. Pero el estudiar ese caso extremo nos sirve para ver como la agresividad es subóptima en algunos casos, siendo mucho más rentable elegir otras vías, como retirarse, o ver/pasar. Si el oponente no se va a retirar nunca (ya sea porque tiene la mejor mano posible como porque es muy loose), no tiene ningún sentido ser agresivo a menos que sea para que sacar más rentabilidad a nuestra mano. No existe la posibilidad de ganar el bote tirándole, así que perdemos una de las dos formas que tiene el juego agresivo de ganar.
En el mundo real, volviendo otra vez al hilo de 2+2, vemos como existen muchos más factores. No sólo el hecho de que podamos hacer call y explotar errores del oponente en rondas de apuestas posteriores, sino que el rival se va a saber adaptar, no va a ser una máquina que se dedica a apretar a raise cuando se le da la opción de hacerlo. Si ve que después de subir, con dos cartas cualquiera, nosotros resubimos absolutamente siempre, puede adaptarse de varias maneras, dependiendo de dónde cree que cometeremos un error más grave (que le reporte más dinero a él).
Si piensa que nos vamos a creer una reresubida suya y retirarnos un porcentaje alto de las veces, pues puede resultarle automáticamente rentable reresubir con cualquier cosa. Si cree que estamos lo bastante locos como para que vayamos a reaccionar rereresubiendo all-in con cualquier cosa, pues entonces lo que deberá hacer es prepararse para eso, modificando su rango de rereraise o de raise inicial, de igual manera que hicimos nosotros antes cuando el oponente era un maníaco.
Es por este motivo que entre gente que juega súper agresivamente, podemos ver como se acaba all-in preflop con stacks efectivos de 100 ciegas, con manos que pueden parecer muy malas, como 44 o A5o, por poner algún ejemplo. Mientras que entre gente muy pasiva sólo se chocan cuando tienen verdaderos monstruos, como un AA contra KK.
En el póquer hay infinidad de situaciones diferentes, y no se puede generalizar. La opción más agresiva no es siempre la más rentable. “La fuerza sin control no sirve de nada”. Debemos adaptarnos a nuestro oponente. Contra algunos con 100 ciegas deberemos estar contentos de ir all-in preflop con QJs, mientras contra otros tiraremos KK correctamente.
Entonces, en el caso descrito en 2+2, estoy totalmente de acuerdo con el autor y otros que apoyan su teoría de que es correcto subir con 2 cartas cualquiera a 3 ciegas estando en el botón en HU. Estoy de acuerdo en realizar tal movimiento siempre y cuando nuestro rival cometa algún error a consecuencia de ello. El más obvio es que se retire más de un 62.5% de las veces, pero hay muchísimos más que puede realizar, como reaccionar como un maníaco, pudiendo entonces nosotros aprovecharnos de ello haciendo una reresubida (o subida) con un rango menor del que él considera que tenemos. En tal caso él estaría cometiendo el error de definir incorrectamente nuestro rango, y actuar como si fuera más grande de lo que realmente es. La agresividad en su situación es subóptima, siendo más correcto retirarse o ver.
También puede ser que decida ver la apuesta y después cometa fallos postflop, que pueden ir desde retirarse un porcentaje muy alto a nuestra apuesta de continuación del flop como a reaccionar también sobreagresivamente. Es decir, la clave está en ver qué hace el rival, cómo responde a nuestras acciones, y adaptarnos en consecuencia a ello. Un enfoque agresivo no siempre es el mejor.
No debemos cegarnos con eso de que es mejor jugar de forma agresiva porque así podemos ganar la mano de dos maneras.
Otro dato importante, ya situándonos en el caso concreto de los HU, es que si nuestro nivel es igual o mayor que el del oponente, no es rentable retirarse nunca en la ciega pequeña, por el hecho de que sólo tenemos que invertir media ciega habiendo ya 1.5, y todas las manos tienen una equity superior al 25%. Esto es un tanto complejo de entender. Lo intentaré explicar.
Igualando la ciega con cualquier mano, lo que estamos haciendo es lo mismo que poner los dos jugadores 1 ciega directamente. Por lo tanto, es como si la ciega grande hablara antes, ya que nosotros siempre hacemos lo mismo cuando somos la pequeña: ver. Vamos a tener posición (hablar últimos) en todas las rondas de apuestas posteriores. Pero no sólo eso, sino que si el oponente hace antes del flop algo diferente a pasar, es como si habláramos últimos también preflop. Y si pasa, nos estará dando información, a menos que absolutamente siempre haga lo mismo, igual que nosotros siempre igualamos la ciega pequeña. En tal caso, es como si no existiera el preflop y simplemente se llegara al flop con un bote de 2 ciegas.
En las rondas de apuestas siguientes pasa igual. Imaginemos que el rival pasa siempre, nunca apuesta. Entonces, cuando lo haga, no sabremos nada de su mano, simplemente que forma parte de todas las combinaciones posibles, desde AA hasta 32o. Si nosotros hacemos lo mismo, pasamos todas las calles, vamos anulando la acción. Es como si hubiéramos ido all-in preflop con 1 ciega cada uno.
Ya sabemos que el póquer no suele ser tan sencillo, el oponente subirá, apostará, pasará con la intención de subir, etc., y nosotros deberemos ser capaces de deteminar con qué rangos hace unas cosas y otras, para poder adaptarnos de la manera que resulte más rentable (que como hemos visto antes, no tiene porqué ser la más agresiva).
En póquer hay muy pocas situaciones en que habrá un movimiento óptimo sin importar quién sea nuestro oponente o nuestros oponentes. Éstas suceden cuando tenemos una cantidad muy pequeña de fichas respecto al tamaño de las ciegas. Pero, exceptuando esos raros casos, no existe ninguna jugada que sea buena ni mala de por sí, sino que todo depende de contra quien nos enfrentemos. Algo como subir directamente all-in a 100 ciegas con cualquier cosa en la ciega pequeña puede parecer un disparate, pero no lo es si el oponente es tan extremadamente conservador como para ver sólo con AA.
Con este artículo pretendía demostrar dos cosas. La primera es que la opción más agresiva o convencional no siempre es la más correcta, sino que depende de contra quién nos encontramos. Y lo segundo es que en HU, contra gente igual o peor que nosotros, es incorrecto retirarse con cualquier mano en la ciega pequeña.