Escríbale a su congresista!
Como era de prever, la ley que entrara en vigencia el miércoles de la semana pasada en Washington y que calificaba de delito a las apuestas en internet en ese estado (incluyendo por supuesto al poker online) ha suscitado muchas controversias y reacciones de parte de aficionados, empresarios y la población norteamericana en general.
Las acciones directas ya han comenzado y además del lobby que están realizando las empresas, aprovechan la inmensa cantidad de asociados a sus salas para presionar a los congresistas y que éstos den marcha atrás en la ley.
Precisamente, PocketFives.com y la Asociación de Profesionales del Poker, están invitando a una campaña de un día (Write your Congressmen Day), en el que todos sus asociados envíen emails solicitando la modificación de esa ley a los congresistas. Esta campaña está prevista para el 15 de junio.
En una editorial (http://www.pocketfives.com/1AC4F687-826D-4965-861C-1BEF4167FC25.aspx), afirma que "el poker es tan americano como el pastel de manzanas. Invención norteamericana como el Jazz y el Baseball; es un juego tradicional que practican y disfrutan millones de personas en sus casas y fuera de ellas. Muy pocas personas van a través de la vida sin sentarse alrededor de una mesa en la cocina, con unos cuantos peniques alrededor, armando gruesos bluffs y viendo con coraje las apuestas rivales."
En el resto del texto analiza cada uno de los puntos principales de la nueva ley, argumentando en contra de ella y haciendo hincapié en la equiparación del jugador de poker online con otros delincuentes.
El texto finaliza con una invitación a unirse a la campaña, enviando el 15 de junio una solicitud de modificación de la ley al congreso, incluyendo un modelo que quienes deseen adherir sin escribir su propio email, pueden firmar y enviar.
A través de un enlace disponible en el mismo artículo, se puede leer una editorial de Los Angeles Time del 9 de Junio pasado, donde vuelven a analizarse los pormenores de la ley aprobada, y de donde se rescata una frase: ¿No tiene el gobierno mejores cosas que hacer que intentar evitar que la gente apueste al Super Bowl o el Final Four?