Los primeros millonarios de 2015

Con tan solo dos semanas transcurridas del año recién iniciado, ya son cuatro los jugadores que han superado el 1.000.000$ en premios en el circuito.

Es la magia de la Pokerstars Caribbean Adventure, una de las citas imprescindibles del curso pokerístico y que casi obliga a sus invitados a coger el avión con las uvas de la suerte en la boca.

Estos cuatro jugadores han superado a la primera el listón que diferencia una temporada triunfal del resto, el redondísimo 1.000.000$. La leyenda de Jason Mercier en el circuito tiene su base en que el Team Pro ha superado esa cifra en premios en sus siete años previos en el circuito, a excepción de 2012.

De no ser por aquel año, en el que le faltó medio millón, Jason Mercier habría igualado, y posteriormente superado, el récord de temporadas consecutivas con siete cifras en premios, que hoy en día ostenta Erick Lindgren con cinco.

Stephen O’Dwyer

Todos seguimos con interés lo cerca que estuvo Mercier de coger a Lindgren pero, visto en perspectiva, el que más cerca ha estado de lograr semejante hazaña es ni más ni menos que el primer millonario del año, Stephen O’Dwyer.

El triunfo en el Super High Roller de 100.000$ de Bahamas asegura para el jugador norteamericano su tercera temporada consecutiva superando la cifra mágica en premios, algo que consiguió por primera vez en 2011 gracias a un segundo puesto en el EPT de Londres que ganó Benny Spindler y a una victoria en el paralelo más importante de la Bellagio Cup VII. 

En 2012, a O’Dwyer sumó 884.000$ en premios. ¡Si aquel año hubiera conseguido una caja más por 116.000$, el Super High Roller de Bahamas le hubiera asegurado matemáticamente igualar el récord de Lindgren! Mejorar solo un puesto en el WPT World Championship en el que acabó quinto o en el High Roller de las WSOPE en el que terminó en séptimo lugar también le habría asegurado un puesto en la historia. Así de cerca le anduvo.

O’Dwyer sale de Bahamas reforzado en su papel de superestrella del poker, lugar de honor que se empezó a forjar con su triunfo más sonado, la Grand final del EPT Montecarlo de 2013.

Kevin Schulz

La proliferación de High Rollers está robándole algo de sentido a esta particular clasificación. Daniel Negreanu, que lleva cuatro años cumpliendo elos mínimos, probablemente igualará a Lindgren este año -ya lo tenemos en el punto de mira por si acaso- y otro habitual de estas carísimas citas como es Sam Trickett ha roto una racha de cuatro años consecutivos por encima del millón quedándose bastante corto en 2014.

Igualar a Lindgren está más al alcance que nunca para esta élite de jugadores. Por eso, en nuestra opinión, tiene más mérito romper la barrera del 1.000.000$ a base de cajas en eventos principales.

Pocos torneos de estas características hay en el año que aseguren siete cifras a su campeón. Dejando aparte esa aberración estadística que es el Main Event de las WSOP , con sus miles de jugadores y su mesa final de futuros millonarios, se pueden contar con los dedos de las manos las oportunidades de cumplir el expediente de una sola sentada.

Ese es el caso del evento principal de la PCA, la segunda caja de relumbrón de Kevin Schulz, un jugador que tenía como mayor logro en su currículum en vivo una mesa final de las WSOP. En un solo torneo ha multiplicado por tres los premios ganados en toda su carrera.

La mesa final de este año tenía un perfil online muy acusado, y el anterior párrafo, con ligeras modificaciones, sería aplicable a casi todos los finalistas. Schulz empezó la FT en una muy poco envidiable posición, a la izquierda del chipleader y máximo favorito Chance Kornuth, pero desarrolló un gran juego que le llevó a derrotar al peruano Diego Ventura en el heads-up.

Ilkin Garibli y Joe Kuether

En teoría, el High Roller de 25.000$ debía completar un triunvirato de grandes ganadores en Bahamas, pero un pacto previo al cara a cara convirtió al trío en cuarteto.

El bielorruso Ilkin Garibli se ha ganado la envidia sana -y la insana- de muchos aficionados. No solo dispone del capital para que el primer torneo que juega en su vida sea un High Roller sino que se lleva el jackpot.

Proveniente de una república ex-soviética con muy poca presencia en el poker internacional, su triunfo le coloca directamente como el primero en la lista histórica de premios de Azerbaiyán.

Garibli, que decía no tener paciencia para los torneos y preferir una partida de cash con sus amigos, ya ha prometido acudir a Malta y Montecarlo. Probablemente le baje el ROI.

Por su parte, Joe Kuether es precisamente el perfil de jugador del que nos alegramos que haya roto la barrera del sonido. Un verdadero jornalero, llevaba tres años redondeando sus premios anuales alrededor de los 750.000$ a base de patearse todo cuanto circuito se juega en Estados Unidos. El 1.050.000$ ganado en Bahamas le permite embellecer su carrera, que ya muestra 3.719.122$ acumulados en cobros en diferentes casinos.

Cuatro millonarios, cuatro perfiles completamente diferentes que no tardarán en ver su exclusivo club invadido por los triunfadores de la siguiente gran cita del circuito, los Aussie millions, festival especialmente conocido por sus High Rollers: entre el viernes 23 de enero y el próximo 2 de febrero completará tres eventos de 25.000$, 100.000$ y 250.000$ de entrada, respectivamente.