El fundador de PokerStars Isai Scheinberg se enfrenta a una pena máxima de cinco años de prisión

El culebrón del Black Friday podría llegar a su fin casi nueve años después. El fundador de PokerStars ha estado en los juzgados de Nueva York esta semana para afrontar los cargos que se le imputan por operar de forma ilegal en Estados Unidos hace una década. Hecho que acabó propiciando el fatídico Black Friday que todos recordamos.

Scheinberg es el último de los 11 acusados que finalmente se ha presentado ante la justicia americana, que lleva detrás de él desde 2011 y a la que hasta ahora había sido capaz de evitar. Una orden de extradición estuvo a punto de llevarlo por la fuerza a Estados Unidos desde Suiza en enero, pero Scheinberg logró evitarla, aunque finalmente decidió presentarse en Estados Unidos de forma voluntaria para afrontar los cargos que se le imputan.

Todo parece indicar que Scheinberg ha llegado a un acuerdo para declararse culpable, pero esto no impide a los fiscales tratar de buscar la pena máxima por estos delitos, que son cinco años en una prisión federal.

En el caso de que Scheinberg fuera condenado a cinco años de prisión, sería de largo el acusado con la pena más severa de todos los relacionados con este caso. El fundador de Absolute Poker, Brent Buckley, se declaró culpable por fraude bancario y fue sentenciado a 14 meses de prisión. En lo que respecta a Full Tilt Poker, su CEO, Raymond Bitar, declaró tener problemas de salud y necesitar un trasplante de corazón, pero esto no le libró de que le confiscaran 40 millones de dólares a través de diferentes activos. Por otro lado, el banquero de del Estado de Utah, John Campos fue sentenciado a tres meses y Chad Elie a cinco.

Scheinberg era el último eslabón de la cadena que faltaba para dar por cerrado este caso, y parece que finalmente este oscuro capítulo de la historia del poker online llega a su fin. Todavía no se ha determinado la fecha en la que se dará a conocer la sentencia definitiva, por lo que Scheinberg tendrá que esperar al river para ver cómo de cara le sale esta mano.