Esfandiari: "En el último minuto me decidí a jugarlo"

Antonio Esfandiari pasaba a la historia del poker al conseguir esta madrugada la victoria en el Big One for One Drop y un premio de 18.346.673$.

Nolan Dalla, el coordinar de medios de las WSOP, le entrevistaba a las pocas horas de haber conseguido el triunfo en el torneo.

Estas fueron sus palabras.

Antonio, hace una semana y media salías de este mismo escenario con un decepcionante tercer puesto (evento #36). Estabas destrozado. ¿Pensaste en ese momento que algo así iba a ocurrirte?

Sí. Creía en ello y así lo manifesté. Haber quedado tercero en ese torneo aumentó mis deseos de ganar aún más. Tuve muy mala suerte cuando quedábamos tres jugadores así que me propuse volver y ganar.

En tu propia escala de grandeza, ¿cómo de grande es esto?

Pues algo así como el 182. Esto es mejor que el sexo, eso te lo aseguro.

Hablanos de la última mano cuando estabas sudando la gota gorda porque no completara el proyecto de color. ¿Cómo de fuerte latía tu corazón?

No te creas que latía tan fuerte. Procesé la situación y pensé: bien, aquí estamos. Este es el momento. Si sorteas ese proyecto habrás ganado el torneo más grande en la historia del poker. Y ya está. Es el momento. Aquí, ahora. Estaba suplicándole al cielo ese “one time”. Estoy bastante seguro de que he usado todos los one-time que me quedaban en este torneo, pero está bien. Había comentado con anterioridad que si gastaba mis one-times de los próximos cinco años estaría muy contento.

¿Cómo cambia tu aproximación al juego cuando estás frente a gente para los que más de un millón de dólares no es demasiado dinero?

Honestamente, nada en absoluto. Es un torneo de poker como cualquier otro. Te dan dos cartas y tu rival también. Juegas con tu stack, tu posición, y con el jugador. Y, sabes, no hay ninguna diferencia. Yo solo quería ganar este torneo.

Hablemos un poco sobre lo que significa madurar. Hace unos cinco años vivías en una fiesta continua y...

¿Quién dice que he madurado?

Yo creo que has madurado un poquito. Creo que salías mucho más de fiesta y estabas menos concentrado en tu juego. ¿Me equivoco?

Absolutamente. Es una cuestión de sentido común y tratar de poner las cosas en perspectiva; lo que  es importante y lo que no. Finalmente, estar todo el día de fiesta no es algo que me hiciera especialmente feliz, Me encantaba, no me malinterpretes. Simplemente dejé eso a un lado. Ahora tengo 33 años y estoy decidido a vivir una vida mejor. En estas World Series decidí que iba a levantarme temprano todo los días, ir al gimnasio, tener disciplina y ganar un brazalete.

¿Crees que todo eso te ha ayudado a conseguir el brazalete? ¿Ha sido a causa de tener una vida más organizada?

Seguro al cien por cien. No tengo ninguna duda. Tengo que darle las gracias a Corrine June, mi coach. Ha estado ahí durante todo el torneo, los días previos, en los descansos. Si queréis entrevistarla os lo recomiendo. Es fascinante.

¿Cuál fue el primer momento en el que te viste ganando el del torneo?

Honestamente, he estado visualizándolo todo el tiempo. Pero es que lo he visto así en cada uno de los torneos que he jugado en estas World Series, solo que esta vez se ha hecho realidad. Lo sentí así en la mesa final. Sabía que era mi momento.

¿Sentiste que era tu torneo desde el primer momento? Se te veía muy relajado. Estabas jugando con Bill Perkins e ibas de un lado para otro. Llamabas a uno y a otro, le pedías a David Einhorn para organización benéficas. Parecías más cómodo que cualquier otro jugador en la mesa. ¿Crees que esto es así?

Es muy probable. Otros jugadores también se mostraban cómodos aunque quizás no sean tan extrovertidos. Ya sabes que mi estilo es hablar y pasar un buen rato. Trato de que las mesas de poker sean un lugar en el que me lo paso bien en lugar de estar ahí sentado aburriéndome. El poker puede llegar a ser muy aburrido así que trato de disfrutar en cada mano, en cada torneo, en cualquier parte. El hecho de que fuera el One Drop no cambiaba eso.

¿Cómo crees que este torneo ha cambiado tu vida, Antonio?

Llegué al circuito de poker hace ya algunos años y he tenido algunos éxitos desde entonces. Durante un tiempo no gané nada aunque no es algo que me preocupara mucho. Me mantuve en la escena del poker gracias a otros shows, gané un WPT y eso estuvo muy bien. Todo eso se asiente sobre el hecho de que Antonio Esfandiari es realmente un jugador de poker.

¿Y qué vas a hacer ahora?

¿Que qué voy a hacer?  ¿Irme al bar, quizás?

¿Has pensado en los 18 millones de dólares?

Te juro, lo creas o no, que no he pensado un solo segundo en el dinero. Lo que quería era ganar.

Al final del programa le diste el brazalete a tu padre. ¿qué significaba eso? ¿Cuándo decidiste que ibas a hacerlo?

Ayer por la noche le dije a mi hermano, “esto es por papá”. Y al final pude darle el brazalete. Mi padre ha sido mi mayor apoyo. La primera vez que el invité a un casino para verme jugar se sentó detrás de mí y le iba enseñando mis cartas. Antes incluso de que el poker se hiciera tan popular el ya me había dicho, “Hijo, te apoyo al 100%”. Estaba conmigo en esto y era sorprendente. Al principio no era así pero un día vino a verme jugar y le iba diciendo las manos que tenían los otros jugadores. Entonces me dijo, “Vale, ya lo entiendo”. Desde entonces ha sido mi principal seguidor y le quiero con locura. Es el mejor hombre del planeta. Abandonó muchísimas cosas para venir a este país ; básicamente todo. Haber ganado esto para él y haber podido darle este brazalete significa absolutamente todo para mí. Voy a llevarlo puesto esta noche pero, a partir de mañana, es el brazalete de mi padre.  [NdT: Antonio es iraní y su familia emigró a Estados Unidos cuando él tenía nueve años]

¿Es más importante para ti esta victoria que ganar el Main Event?

Sabes, he tenido esta conversación con alguien y no lo tengo del todo claro. Esto ha sido algo histórico, sin precedentes. Si tuviera que escoger uno de los dos torneos para ganar este año, creo que escogería este. No sé lo que se siente al ganar el Main Event pero ya te lo diré este mismo año.

¿Has pensado en donar algo del dinero a obras benéficas?

Por supuesto, a One Drop.

¿Sabes ya cuánto?

No, aún no.

¿Cuándo decidiste que ibas a jugar el One Drop?

Tan solo unos días antes del torneo. No iba a jugar porque iba a hacer de comentarista pero leugo hice tercero en ese evento y pensé, “Ummmm”. En el último minuto me decidí a jugarlo.

¿Hay algunos inversores muy contentos ahora mismo por ahí?

Me acojo a la quinta enmienda.