Adrián Mateos cae en el Día 1 de la Super High Roller Bowl de 305.000 $

La Super High Roller Bowl vio la luz en 2015 y desde entonces nos ha regalado incontables momentos que han pasado ya a los libros de historia del poker. Desde la victoria de Brian Rast en la primera edición que tuvo una entrada de 500.000 $ y en la que ganó 7,5 millones de dólares, hemos asistido a las victorias de jugadores como  Rainer Kempe, Christoph Vogelsang, Justin Bonomo o Isaac Haxton.

Dado el éxito que tuvo dentro de las fronteras estadounidenses, la Super High Roller Bowl hizo las maletas para hacer el turn internacional visitando lugares como Macao, Londres, Bahamas, Australia o Rusia.

En esta ocasión han regresado a los estudios de PokerGo en el Aria para celebrar un torneazo justo antes del inicio de las WSOP. Con un buy-in de 250.000 $ los jugadores recibieron un stack inicial de 300.000 puntos. Niveles de 90 minutos y descansos de 10 minutos fue la hoja de ruta que siguieron ayer los 19 jugadores que se registraron en el torneo.

Entre los presentes ayer vimos a jugones de la talla de Michael Addamo, Jason Koon, Mikita Badziakouski o David Peters, pero el que más nos interesaba de todos era el nombre de Adrián Mateos, que se plantó en el Aria con 305.000 $ para batirse con este field de pesadilla.

El madrileño perdió casi un tercio de su stack contra Foxen en una mano en la que había abierto desde el BTN. Kenney pagaba en la ciega pequeña y Foxen defendía su ciega grande. El flop era Js9s8c y Mateos disparaba tres cuartos encontrando el fold de Kenney y el check-raise de Foxen.

Amadi pagaba para ver el turn 7c y Foxen disparaba 45.000 puntos en un bote de 58.000. El madrileño volvía a pagar y el river era un  2h en el que Foxen metía al centro 120.000 puntos y obligaba a Amadi a gastar tres tarjetas de tiempo antes de foldear. Foxen enseñaba un 7s.

Las cosas no comenzaron bien para el madrileño y no siguieron mucho mejor. El siguiente encontronazo fuerte también lo perdió, pero en esta ocasión contra Chidwick. El inglés lanzaba un squeeze de 21.000 puntos desde la BB ante la apertura de Mateos desde el CO y el call de Foxen en la ciega pequeña. Mateos anunciaba el 4-bet a 51.000 puntos y Chidwick pagaba para check raisear a 65.000 ante la apuesta de continuación de Amadi de 30.000 puntos en un flop 8s5d6h. Amadi las tiraba al mazo y se quedaba con 105.000 puntos.

Finalmente se produjo la eliminación del madrileño en una mano en la que 3beteo a 20.000 unos  8h8s desde la SB ante la apertura de David Einhorn desde BTN y se encontró con el cold 4-bet de Kenney desde la BB a 55.000 puntos. El madrileño jugaba un stack de 74.000 puntos y anunciaba el all-in encontrando el call de Kenney con AcTh.

El flop no ayudó al número 1 de la All Time Money List, pero un as en el turn hizo saltar por los aires al madrileño.

La acción se detuvo cuando quedaron solo 10 jugadores en pie liderados por Alex Foxen, pero en el field todavía quedan jugones como Bryn Kenney, Justin Bonomo, David Peters o Jake Schindler entre otros.