Rainer Kempe gana la Super High Roller Bowl

La segunda edición de la Super High Roller Bowl celebrada desde el Convention Center del Aria ya conoce el nombre de su ganador. La victoria fue a parar a manos de Rainer Kempe, quien se hizo con los 5 millones de dólares destinados a su ganador escribiendo así una página importante en la historia del poker moderno.

Lo cierto es que Kempe era uno de los jugadores menos conocidos de los 49 que tomaron parte en este torneo. Bien es cierto que había firmado resultados importantes en torneos recientes, como dos mesas finales de EPT (Barcelona y Malta) o una mesa final en las WSOP, concretamente en el 1.111 Litte One Drop, pero no es menos verdad que su popularidad no se podía comparar con la de nombres como Jason Mercier, Isaac Haxton o Scott Seiver, por mencionar algunos. Seguro que a partir de ahora, eso habrá cambiado.

El definitivo día 4 de éste, el torneo más caro de 2016, comenzaba con siete jugadores ya en puestos premiados, después de que la jornada anterior Dan Smith cayera en burbuja eliminado a manos de Fedor Holz. 

Pese a que la cola del pelotón la ocupaba Phil Hellmuth, éste consiguió doblarse en un par de ocasiones, una de ellas a costa de Dan Shak, lo que hizo que ambos jugadores cambiaran sus posiciones de inicio. Finalmente fue Shak el primero en caer eliminado a manos de Fedor Holz con  KdJs contra  As9d del alemán.

También fue Holz el responsable de firmar la siguiente eliminación, concretamente la de Bryn Kenney, cuando éste, también muy corto en fichas, se restó con  7d7h encontrando por el camino al joven jugador germano esperándole con  JdJc. Fin de la historia para Kenney.

Matt Berkey, que contó con un comodísimo liderato al comenzar el día 3 del torneo, fue el siguiente en salir, haciéndose con un premio valorado en 1.100.000$, el más importante hasta la fecha en su carrera. Kempe fue el encargado de enseñarle la puerta de salida, como también sería el encargado de eliminar al cuarto clasificado.

Éste fue Phil Hellmuth, que pese a empezar como short-stack, supo remar y escalar un buen número de posiciones, lo cual se tradujo en un mayor premio del que en un principio cabía imaginar.

Ya con tres jugadores sobre la mesa, las diferencias en puntos eran muy grandes. Erik Seidel, que comenzaba la mesa final como el segundo jugador más corto en fichas, no pudo hacer mucho más que remar y sobrevivir como buenamente podía, viendo como poco a poco sus rivales iban cayendo eliminados, pero en ningún momento contó con un stack como para pelearle el título a los dos alemanes que acabarían protagonizando el heads-up. 

Cuando le quedaban 12 ciegas, se restó desde la ciega pequeña con  Ac7d encontrándose a Fedor Holz con  AhTd en la ciega grande. El board no ayudó, y de esta forma Erik Seidel caía en tercera posición, dejando efectivamente servido el heads-up entre Rainker Kempe y Fedor Holz.

El cara a cara comenzaba con ventaja de 9:5 a favor de Kempe, quien poco a poco fue mermando el stack de su compatriota hasta que Holz decidió restarse con pareja de doses, topándose con la pareja de ochos de su rival. Ahí acabó el torneo, con victoria de Kempe que de esta forma se lleva el primer premio de siete dígitos de su carrera y logra así una de las victorias más importantes del año.

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