Winamax SISMIX

El madrileño sigue siendo el dueño y señor de su mesa, y eso que hay algún que otro stack que podría llegar a incomodarle, pero eso no es excusa para que deje de moverse como suele hacer.

De hecho, le acabamos ver lanzar uno de los pocos 4bets que no sean "all-in" que hemos visto en las últimas horas (o incluso días). Abría la mano un jugador en UTG a 115.000, justo a su izquierda, el CO lanzaba un 3bet a 320.000 (stack deep) y en ciega grande, Adrián ponía el precio algo más caro, hasta 880.000.

El primer agresor se tiraba rapidito, pero

¿Quién sino? Adrián Mateos acaba de llevarse por delante a un nuevo rival con una de esas manos marca de la casa, la cual además le ha servido para recuperar el liderato.

Abría Adrián en UTG a 100k y le pagaba el rival del botón. En el flop caía  Jc9d6c. El madrileño continuaba a 100k y "call" del rival.

El turn era el  Kh, ante el que Adrián continuaba su historia, esta vez disparando 350k. De nuevo, call de Michael Sasha.

En river caía un  8c. Las opciones eran hacer una apuesta por valor de unos 600k o mandarlas todas

No ha tenido mucha suerte R. Pérez a la hora de buscar su nuevo asiento cuando han roto la mesa #5, no solo porque ha ido a parar a la mesa que ocupa Adrián, sino porque estará sentado entre el madrileño y Sylvain Loosli, que seguramente sean los dos mejores jugadores que quedan en pie. 

Veremos qué tal le va esta nueva ubicación al español. Por lo menos nos será más fácil tenerles controlados.

Tras el descanso de la cena, las hostilidades siguen a pie de guerra. Las eliminaciones se siguen sucediendo mientras los tres españoles que quedan en juego se mantienen con vida.

Hablando de ellos, repasemos un poco: 

R. Pérez está en la mesa 5, cómodo, con más de 2.000.000 de puntos y jugando muy tranquilo, sin ningún rival especialmente conocido.

En el caso de Colillas, le han movido a la mesa de Henrique Pinho, que maneja el stack dominante en estos momentos. Además, le tiene justo a su izquierda, lo que puede complicar la vida al español.

Adrián Mateos, por su parte, sigue compartiendo mesa