Cuando hemos llegado a la mesa nos encontrábamos a Mario apostando 3.000 en el turn en un board 632T. Su rival le pagaba desde la ciega grande. El river era un 8, una carta aparentemente "blanca" y "lostto" apostaba 8.500 que le pagaban para mostrar nuts con su 79s que significó una escalera runner runner.
Aire para el malagueño que había bajado a 26.000 puntos en una mano anterior en la que tuvo que abandonar en el river ante una apuesta de la mitad de su stack.