¡La visión del reportero! Víctor Martínez 'Vuchuu' sobre el 888 Poker Masters

El pasado fin de semana se disputó en el Casino Gran Madrid de Torrelodones el primer 888 Poker Masters de la historia. Si bien inicialmente no íbamos a cubrir el torneo, al iniciarse la semana recibía un correo electrónico de Leo Margets que me comentaba su interés por que fuese. Lo cierto es que no había cubierto ni un solo torneo en España en todo el 2009, aunque sí había estado en dos CEPs, no había hecho seguimiento en ellos. Resultaba extraño después de haber cubierto veinte torneos en 2008 en nuestro país (diez CEPs, seis SPTs, el EPT de Barcelona, UPO de Madrid, por Equipos de Aranjuez y el I Open Español de Villajoyosa), el esperar hasta finales de marzo en hacer el primero.

Llegaba el viernes a Madrid, para aprovechar mi viaje y conocer así la vida nocturna de la ciudad. Curioso mi primer contacto con la fiesta en la capi, pero eso es otra historia. El caso es que llegaba con pocas horas de sueño al hotel Torrelodones, dónde me hospedé en esta ocasión.

He estado cuatro veces, que recuerde ahora mismo, en el Casino Gran Madrid. En el UPO, el CEP, el invitacional que inauguró la sala y en el 888. En el invitacional volvimos Simón y yo para Valencia la misma noche, y el resto de ocasiones me he hospedado en cuatro hoteles distintos (dos durante el UPO). Quitando el Hotelux, que está bastante lejos, en Villalba, a unos 15 kilómetros, ninguno de los otros tres me ha gustado. No sé, no me siento cómodo en ellos, no es cuestión de lujo, sino de comodidad. Aunque éste seguramente sea el mejor de los tres.

En el hotel estuve lo justo para ducharme, porque había quedado para comer con un buen número de jugadores. La comida era en el Asador El Álamo, de Iñaki Ongay. Cuando llegué estaban Pablo Carballo, Amatos y Julio Díaz. Con Amatos y Julio Díaz allí, ya sabía que la comida iba a ser excelente, y no me equivocaba.

Es genial reunirse antes de los torneos con la gente del mundillo. Además de comer de lujo, te enteras de mil y un rumores, de cómo les va en internet a todos, futuros viajes, etc. Es como leer la mejor revista de poker de España, lo que no se habla ahí, no ha pasado.

Entre los asistentes, Pakito, Sobraoboy, Rivichico, Felipe Basas, PedroKL, finitofl, Garnerus, Pablo Baldor, y más de uno y de dos que me dejo seguro. Después vendría a tomar el café y la copa más gente, además de un pequeño grupo más a comer. Cuando todo había terminado Krusty me llevó junto con El Toro Páez al casino. Todo estaba listo para una gran fiesta del poker.

Ya había estado, como he dicho antes y como leísteis en su día, en la nueva Poker Room de Torrelodones, pero esta nueva visita era distinta. Se trataba de el primer torneo a nivel nacional, y todo estaba perféctamente preparado.

El Casino Gran Madrid organiza el que posiblemente sea el mejor torneo semanal del España, al menos en cuanto a participación, y eso sin duda se nota en la experiencia de sus crupiers.

Además, teniendo seguramente las mesas de cash más concurridas también, el poker no es, ni mucho menos, una parte poco importante de la vida del casino, como puede aparentar ser en otros lugares, sino que está realmente integrado en el personal. Además, la cantidad de jugadores locales, habituales, que ofrece a sus torneos el Casino Gran Madrid es tremenda.

En cuanto a la organización del torneo, tanto a Leo como a Conejo se les veía ilusionados. No, ilusionadísimos. Leo andaba de un lado a otro y no sabía muy bien qué estaba haciendo en cada momento. Tenían claro que querían que la puesta en marcha del primer torneo en vivo de 888 a nivel nacional tenía que ser un éxito de organización. Y lo fue, porque no he oído ni una queja de la organización en todo el fin de semana, y esa es la mejor muestra de éxito que mi experiencia en torneos me ha hecho ver.

Por si no fuese suficiente con tener unos organizadores nuevos, éste también era el primer torneo para el director del mismo. Al menos, como él mismo me decía, era el primer torneo “sin tener a alguien mirando en la puerta si venían los Mossos”. Asistido en todo momento por el director de poker de Torrelodones, Basilio Hacha, César Garrido hizo un papel excelente, aportando además una estructura de torneo que resultó curiosa.

Con unos primeros niveles muy pequeños, empezando en 25/25 con 15.000 puntos, luego parecía que se convertiría en la temida lotto poker el torneo a medida que fuese avanzando. Pero lo cierto es que sólo rondando la burbuja las ciegas apretaron realmente, y la mesa final tuvo en todo momento una M de diez, aproximadamente, lo cual está bastante bien comparado con otros muchos torneos nacionales.

César, muy autocrítico, no estaba demasiado satisfecho con su papel en un par de situaciones de la mesa final, pero sin duda hizo un trabajo tremendo, y de la misma forma que lo felicité al terminar el torneo, ratifico aquí mi felicitación.

Una vez dicho esto, pasemos a hablar del torneo. 128 jugadores participaron en el mismo, y de ellos había fácilmente sesenta conocidos. Habituales del circuito nacional. Era una cifra gigante para el tipo de seguimiento que me había planteado hacer.

Al no ser el único que estaba siguiendo el torneo, y al no tener medios suficientes para dar una información multimedia interesante, decidí antes de ir al mismo casino probar con un tipo de seguimiento nuevo. La idea era basarme en lo que más le interesa a la gente que está viendo un seguimiento en directo, quizás descartando así cierta información que normalmente le gusta leer a la gente que sigue los torneos “en diferido”. ¿Qué es lo que más le interesa? Supongo que vosotros mismos lo podéis responder al preguntaros qué buscais en un seguimiento.

Ver si siguen vivos, y con cuántos puntos, los jugadores que conozco, ¿verdad? Pues eso intenté poner. Y creo que no salió mal del todo, porque mucha gente me felicitó por lo novedoso del seguimiento, aunque algunos sí que me echaron en cara que no había prácticamente manos. Es algo lógico en realidad, si le preguntas a 52 personas, como me pasó en los primeros niveles, cuántos puntos tienes, con que cada un tarde un minuto, ya ha acabado el nivel.

A medida que iba avanzando el torneo y caían jugadores, ya era sólo cuestión de ver manos interesantes en el momento en que no buscaba recuentos de fichas, lo cual tampoco tiene por qué darse. En cualquier caso fue interesante hacer un seguimiento así, y de hecho ahora es mucho más fácil ver en qué nivel cayó cada uno.

De entre las bajas de los primeros niveles de juego, previos a la cena, teníamos a Santiago Terrazas, elflacokanu, Pablo Carballo, PedroKL, Adrià Bataller, Ángel Manso, La Púa, Chelo Navarro o Manu Baena.

El día uno seguiría después con las bajas de Pike, Óscar García-Pelayo, Víctor Mendicuti (que no hizo mesa final esta vez), Luigy, Julio Díaz, Amatos, Sobrao, Páez, Pakito, Tommy1000, Varico, Ángel Blanco, Pablo Baldor, Luzago, Drácula, finitofl, Felipe Basas, Joan Company, Rivichico y un largo etcétera. Incluídos los dos profesionales del patrocinador, Leo y Ricard.

Veintiocho jugadores lucharían por los puestos premiados del día dos, con Mel Pardo y el local Roberto García a la cabeza.

El día dos dejaría fuera de premios a Rizzatto, Tony Cano, y el Treneuro en burbuja. Luego ya dentro de premios Koke, Garnerus, fersan, Santi Torres y Etayo se quedarían fuera de la mesa final, que tuvo entre sus componentes a Pablo Ubierna, Armando Muñoz-Calero, Puzo, Quinti, Mel Pardo y un Miguel Ángel Rodríguez que está en plena forma, consiguiendo un segundo puesto tras su victoria en Aranjuez la semana anterior.

Primer puesto que se llevó Amancio Osorio. Uno de los locales del Casino Gran Madrid, que en todo momento recibió el apoyo de muchos de sus compañeros. Otra felicitación tiene que ir para él.

Y para terminar, y ya que hablé de mi seguimiento antes, y, aunque a muchos esto les pueda sorprender (aunque algunos ya sabían que lo iba a hacer), mi última felicitación tiene que ir para Raúl Vicente, Hikiko, Miguel, y el resto de componentes de 52Cartas, a quienes, para empezar, quiero pedir disculpas por mi alusión en la anterior “Visión del reportero”, que estaba fuera de lugar.

Sé que mi relación con ellos no ha sido, ni es demasiado buena, y tampoco espero con esto empezar a “comer sopas” con ellos, aunque si esto sirve como un primer paso, estaría encantado. Raúl, y todos los demás han conseguido hacer de los seguimientos lo que todos los que alguna vez hemos hecho alguno hubiésemos deseado hacer. No tuve la ocasión de ver el seguimiento en sí, pues me encontraba en el casino, pero el despliegue y el trabajo y empeño de las seis personas que allí estaban me dice que seguramente los que desde casa lo vieron, lo disfrutaron tremendamente.

Hicieron algo que ninguno de los otros medios quisimos hacer, rompieron el mercado, ofreciendo un seguimiento multimedia cuando nadie pretendía pagar por ello, y ni tan siquiera lo habían pensado hacer. Ahora espero sinceramente que para el disfrute de todos los que seguimos el poker desde casa, les vaya bien, porque ganamos todos con la disfusión de calidad de nuestra afición y nuestro trabajo.

Citando a Santi Torres, en un comentario sobre mi seguimiento, “al César lo que es del César”.