Poker: cuando las parejas no están encima de la mesa.
Por todos son conocidas las dificultades del jugador de póquer para compaginar su afición y la vida de pareja.Para la mayoría de las mujeres el póquer es tan solo un montón de horas (y no son pocas) donde el novio o el marido no están disponibles. Si buscamos entre los 1.000 primeros jugadores del ranking mundial de póquer es difícil encontrar un número de jugadoras féminas ni tan siquiera para montar un sit&go.Son innumerables las historias que me han contado estos dos últimos años sobre este gran problema. Yo tan solo contaré la mía.Hecho la vista atrás y me encuentro hace quince días en Gran Canaria, en el Spanish Master de Poker organizado por Miapuesta.com Son las 7 de la tarde, Juan de Diego, ex-editor de revista póquer y director del torneo dando las últimas instrucciones a los jugadores. Gustavo, representante de Miapuesta.com y organizador del evento andando de acá para allá atando los últimos detalles. A mi derecha, en la mesa, Jorge Pla, comprobando su stack inicial y levantándose para hacer las primeras fotos del evento para Asdepicas. A mi derecha en otra mesa, Juan Manuel Pastor, locutor de Eurosport y editor de Pokereuropa España, mandándome los últimos guiños de ojo. Un poco más lejos en otra mesa Alberto Calle (mi compañero en el equipo de mi apuesta.com), ganador del ranking de Casinos de Cataluña delante de 310 jugadores y con 15 mesas finales en el 2006 a sus espaldas.A mi izquierda una mesa para asustar. En ella Isaac Mayolas, campeón del mundo de Heads-up y gran amigo, Pablo rua grandísimo jugador gallego, Roberto Morata, y Antonio Ardila (ganador final de este evento), entre otros.¿Entre otros? Entre otros casi sin pestañear, nerviosa, asustada, escondida, aprendiendo el color de cada ficha e intentando pasar desapercibida, encontramos a Cristina Castellá AKA "Katina", mi mujer. Mi mujer, si mi mujer. Esa maravillosa niña-mujer de 30 años recién cumplidos, entre tiburones, profesionales, expertos, vividores, es la única participante femenina entre 70 participantes.6 horas después tras uno de los días más agotadores que ella recuerda en su vida es eliminada en la posición 32. La posición no importa. Ha jugado, ha aprendido, ha experimentado, ha sufrido mucho; pero sobretodo, sobretodo a acompañado a su marido.Tras su eliminación, se para el torneo y le regalo un ramo de rosas rojas (casi como el color de su cara en ese momento) y la felicito con un sentimiento de orgullo que dificilmente podré olvidar..
Os aseguro que ver a vuestra novia, hermana, o mujer en un torneo de póquer a vuestro lado es una de las sensaciones más bonitas que el jugador de póquer puede experimentar. Estas palabras espero que lo expresen tal como lo sentí. Jamás lo olvidaré, ya que la primera vez es especial. Se me pone la piel de gallina y se me empañan los ojos al recordarlo.Os recomiendo que mostreis la cara más bonita del póquer a vuestras compañeras y no os arrepentireis.
Muchas gracias por todo y por tu apoyo Cristina.
POR CIERTO QUEDÓ POR DELANTE MIO.
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