Crónica del Unibet Open Algarve por Simón Muñoz
Otro avión de regreso a mi querida Valencia, otra reseña de un torneo de poker que voy a escribir, esta vez del Unibet Open Algarve, la última parada del circuito internacional de torneos que organiza Unibet.
Los que os pasasteis por aquí el sábado ya pudisteis leer unas breves líneas sobre el torneo y los españoles que todavía estábamos en liza. Al final sólo 2 entraron en premios, Javier Dominguez "Thalai" 13º (otra vez, que bueno es :P) y Alejandro Sanz "Faramir" 29º. Esta vez la burbuja le tocó a un servidor, quedando en 49ª posición (cobraban 45, pero de esto hablaremos más adelante).
Me gustaría hablar antes del Unibet Open en sí, un circuito de torneos que avanza a pasos de gigante.
El Unibet Open
El Unibet Open es un torneo de 1500€ de inscripción, 4 días de duración, y una estructura similar a la de un EPT. De hecho, se parece mucho a este último por el tipo de jugador que asiste; en su gran mayoría clasificados de Internet, rubios y pálidos como el hielo. No en vano el mercado principal de Unibet son los países nórdicos.
La participante más aclamada por el público, miss Bélgica.
Fácilmente, de los 440 participantes, 250 eran clasificados a través de la propia sala. Las plazas para el torneo se agotaron casi 1 mes antes de la celebración del mismo, y pese a que nadie se pudo registrar desde entonces, ha sido el torneo más grande de la historia de Portugal.
El éxito de la parada de Vilamoura ha sido tal, que Nuno Sala, responsable de Unibet Portugal me comentaba como por primera vez habían tenido más problemas en llenar el día 1B que el día 1A (generalmente la gente intenta jugar el día 1B para ahorrarse un día de viaje, aquí era al contrario, venían un día antes para pasar más tiempo pillando varios tipos de cáncer de piel bajo el sol del Algarve portugués).
He estado pensando bastante en cual puede ser el secreto de tal éxito de convocatoria, sobretodo pensando en lo difícil que resulta llenar los satélites online para cualquier torneo que se celebra en España para españoles. Sin duda, la base de jugadores allá por los fiordos debe ser como 50-100 veces más grande que la española, pero además, creo no equivocarme si digo que el Unibet Open es un circuito donde Unibet invierte muchísimo más dinero del que recibe a cambio (vamos, que palma pasta seguro).
Los paquetes para los jugadores por ejemplo, incluían la estancia durante 5 días en el hotel más lujoso de la zona, el Tivoli Vilamoura, un complejo de 5 estrellas bastante majo. Unibet lo cerró (el día que llegamos ya no quedaban habitaciones que no fueran las de nuestra reserva).
Además del hotel, Unibet tenía muchísima gente dispuesta para la atención de los jugadores de los distintos países. De nosotros se encargó Elena, una chica que trabaja para Unibet en Lóndres, y que nos trató a las mil maravillas (que ya es decir, porque mira que los españoles la líamos... :P).
Algunos miembros de la organización, con Elena en el centro.
Y no podían faltar las fiestas. Dos de bienvenida, cada día 1, y cada día restante una fiesta en una discoteca a 2 minutos del casino. Todas las fiestas con barra libre de serie.
En definitiva, el ambiente en el torneo era magnífico. Más que un torneo de poker, se trataba de unas vacaciones a gastos pagados en los que disfrutar la Experiencia Unibet, y la experiencia Unibet en el Algarve ha sido genial.
Los españoles de fiesta, liándola parda.
El Algarve
Toca hablar de la localización para todos aquellos que no conozcan la zona (creo que dentro de poco ya casi puedo lanzar mi propia guía de viajes de torneos de poker :P).
El Algarve portugués, zona tristemente famosa por la desaparición de Madeleine hace un par de años, es el nombre que se le da a una zona costera del sur de Portugal, uno de cuyos pueblecitos es Vilamoura, sede de uno de los famosos casinos de Portugal.
Para un nórdico Vilamoura puede ser el paraíso del sol, pero para un español, Vilamoura es un sitio al azar más de la costa penínsular. No he estado en Marina D'or, pero leyendo la descripción de Wikipedia, el pueblecito en cuestión debe ser parecido. Un millonario decide construir una urbanización pija, y ya tenemos Vilamoura. Una historia demasiado repetida en la piel de toro.
Es decir, el paisaje no es muy distinto al que te vas a encontrar en cualquier pueblecito de nuestra costa sur. De hecho, mi primera impresión fue que no había llegado a salir de Valencia.
El Casino Vilamoura, tampoco es muy diferente al típico casino español. Arquitectura típica de casino de los de toda la vida (va siendo hora de actualizarse por cierto...), interior oscuro, repleto de moqueta... nada nuevo bajo el sol.
El punto fuerte del mismo era el salón donde se celebró el torneo. En principio un poco incómodo por lo apretados que estábamos, cumplía perfectamente con lo que se le puede pedir a una sala de poker. Espacio para unas 20-24 mesas, temperatura agradable (primera vez que no me tengo que poner la chaqueta en un casino), y unas vistas impresionantes cuando se dignaban a descorrer las cortinas de los ventanales que ocupaban toda una pared del mismo (debería ser pecado tenerlas cerradas).
La dirección del torneo corrió a cargo del director de PokerPT, Joâo Manuel Nunes, y fue perfecta. Los dealers eran descaradamente jóvenes. Parecían recién sacados de un instituto e iban todos en camiseta, sin afeitar y casi hasta sin peinar. Era curioso la verdad. Ya sabéis que no soy muy exigente con este tipo de detalles a no ser que ocurra algo realmente extraño, y en Portugal no ocurrió nada fuera de lo normal, así que un ok para ellos.
El torneo
Sobre el torneo, poco que contar que no haya contado ya en mi página de Twitter en riguroso directo. Tendré que darle un repaso detenido y hacer el análisis habitual, pero creo que eso lo dejaremos para otro día o no acabaremos nunca.
A grandes rasgos, fui bien el primer día hasta que la lié muchísimo muckeando la mejor mano en un bote por un tercio de mi stack en el river (¡peazo de fish!). De ahí cuesta abajo hasta que en los últimos 20 minutos remonté a lo bestia para ponerme por encima de la media.
En el día 2 todo fue bien hasta que perdí AQ vs AK en cut off vs dealer. De ahí hasta el final del día creo que jugué bastante bien shortstack, siempre entre las 12 y las 20 ciegas, sobreviviendo únicamente a base de robos.
Mi última mano fue al comenzar el nivel de ciegas 3000. Mi stack era de 40000 fichas, 13 ciegas aprox, e hice reraise all in con 44 a un raise desde late. Mi rival acabó pagando con AJ y, una J primero, un ás después, y ningún 4 en el river, me dejaron fuera del torneo.
Una pena porque si hubiera ganado me ponía en la media y en una situación bastante cómoda pues la mesa estaba especialmente tight, pero así es el poker :P.
Resumiendo
La Experiencia Unibet merece la pena. Es un circuito hecho para los jugadores y todos los detalles han sido cuidados al máximo. Aún siendo un evento relativamente pequeño, la verdad es que la cantidad de jugadores que lleva la propia sala lo convierte en un torneo con unos premios más que aceptables (151.000€ para el primer clasificado). En definitiva una experiencia que quiero repetir ;).
Pros
- Thalai y Faramir que entraron en premios
- El ambiente entre todos los jugadores
- Miss Bélgica
- La sensacional atención al jugador por parte de Unibet
- El hotel y las fiestas
- Este gato, que no tiene nada que ver con el Open pero mola
Cons
- El finlandés loco exjugador profesional de la NHL que reventó a medio torneo haciendo el cafre
- Palmar en la burbuja... no mola :P
- El yate color plata amarrado en el puerto deportivo... debería ser ilegal no poder llevárselo
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