Segundo día de la crónica de Pac8 en Las Vegas

Bueno, parece que coger un ritmo de sueño adecuado va ser un problema en este viaje. La anterior vez no tuve problemas con el jetlag hasta pasada la primera semana, cuando me empecé a despertar a horas intempestivas. Ayer con solo 6 horas de sueño (yo soy de dormir mucho) y tras todo el día para arriba y para abajo sobre las 8.30 pm no aguantaba en pie, y aunque había un montón de cosas interesantes que ver en el Rio nos volvimos Álvaro y yo al hotel. Pillar la cama y roncar no debió de tardar ni 2 minutos… hoy despierto a las 5.30 am…

Pero volvamos al principio.

Ayer tras desayunar y pasear mientras esperaba que abriera la tienda de electrónica por una Las Vegas desierta, (incluso aquí el domingo a las 8.00 am no hay mas que algún borracho despistado o locos de la salud haciendo jogging), volví al Hotel y les di un poco más de tiempo a estas marmotas aunque resultó que a Perico le pasó lo mismo y estaba también a las 7.00 am en pie). Decidimos empezar el día con una visita a la piscina. No era ni mediodía y el calor era más que considerable. No sabría deciros una cifra porque además aquí funcionan con grados Fahrenheit pero desde luego eran más de 33º Celsius.

El Flamingo tiene dos piscinas, una “normal” y una “Europea”. Por “Europea” se entiende que se permite el topless. Es obvio donde acabamos… la piscina “Europea” tiene un toque de fiesta ibicenca, al tener DJ y estar casi todo el mundo con una cervecita o un cóctel en la mano. En todas las palmeras hay un sistema que pulveriza agua para tratar de refrescar el ambiente y las camareras en bikini te acercan las bebidas al borde de la piscina, así que no tienes ni que salir del agua para recargar y tener que pisar el suelo que arde.

Yo había leído por algún lado que el implante de silicona medio en los USA es un 30% más grande que lo que se estila en Europa, y ahora os puedo decir que ya no tengo dudas al respecto. A los americanos les gustan grandes, y yo no me quejo… (No os puedo poner fotos porque está prohibido llevar cámaras, pero algo apañaremos la próxima vez).

Cuando empezamos a darnos cuenta que por mucha protección 30 que nos pusiéramos estábamos empezando a quemarnos, dejamos la piscina con dolor en nuestro corazón pero de todas formas ya iba siendo hora de pasar por el Rio a recoger las acreditaciones de prensa y a ver como estaban tratando las cartas a nuestros paisanos.

Un trayecto corto en taxi después estábamos entrando en las WSOP… les pedí a estos que no me dejaran comportarme como una colegiala en el un concierto de los hombres G pero es difícil. Esto esta lleno de caras conocidas, y los pasillos del Rio son como un hormiguero de figuras. TJ Cloutier, Howard Lederer o Eskimo Clark fueron de los primeros que nos cruzamos por los pasillos. El Rio es impresionantemente grande y aunque es incómodo que no esté en el strip o ya no tenga el toque histórico de jugarse en el Horseshoe está claro que fue un gran avance el traer las WSOP aquí.

Una vez localizada la sala de prensa nos dieron nuestras credenciales. También probé el “beef jerky” que patrocina las WSOP, que viene a ser una cecina sorprendentemente menos dura que lo esperado pero con sabores exóticos de lo mas peculiares… No puedo decir que lo recomiende.

Nos vamos encontrando con caras conocidas. A Etayo y Tule, Ismael y 'elflacokanu' o a Juan Maceiras Jr. nos los encontramos en los pasillos. Pastor está dentro jugando el Triple chance, May ya está fuera del mismo. Nos encontramos en el rail a Luis Rodríguez esperando que comience el siguiente satélite y Rafael “Percebe” está muy bien situado para hacerse con una plaza para el main event al acercarse la burbuja de su satélite.

Mena y Perico empiezan a hacer planes para jugar el satélite de las 8.00 pm.

Una vez ya con los pases de prensa, llamamos al contacto de Lii poker para que Perico reciba el cheque por los 10.000 para el main event. El Rio es realmente enorme y es un paseo desde la zona de las WSOP hasta la Masquerade Tower piso 26 habitación 26.028 en la que hemos quedado con un tal John… la puerta de su habitación está abierta, signo de que deben de tener tráfico de ganadores de satelites. Tras un par de comprobaciones le dan a Perico un cheque nominativo por 10.000$…

Dejamos a Perico y Mena en la cola de caja para registrarse y Álvaro y yo vamos a ver lo que esta pasando en las mesas. Nada mas entrar nos encontramos con una TV table en la que esta jugando David Williams, pero lo realmente espectacular está hacia el fondo de la sala. Se juega el día 3 del 50.000$ HORSE y está claro que los que siguen vivos algo saben de jugar a esto. Hago uso de mi pase de prensa, no sin antes confirmar con un señor de traje de la organización que realmente un pelao como yo puede pulular como Pedro por su casa entre unas mesas en las que están sentados jugadores de la talla de Patrik Antonius, Erik Seidel, Gus Hansen, Todd Bronson, Tony G o Scotty Nguyen…

El señor de traje me confirma lo que acabo de leer en la sala de prensa. Mientras no molestes a los jugadores durante las manos y no saque fotos con flash puedo hacer lo que me apetezca. En caso de que se junten demasiados periodistas, la organización se reserva el poder limitar el acceso pero de momento estoy libre para campar a mis anchas.

Hay una mesa especialmente espectacular. Gus Hansen, Erick Seidel, Patrik Antonius, y Chiau Giang hacen que esté la cosa como para pedir que te anoten en la lista de espera. Antonius y Gian deben de estar estresados porque están recibiendo masajes. Seidel se levanta un par de veces para firmar autógrafos. Me echo unas risas con la masajista de Giang, tras hacerle gracia mi cara al ver que le esta masajeando los gemelos…

Observo unas cuantas manos, y no puedo evitar esa sensación de groupie al ver como juegan unas manos de Omaha Hi-Lo de lo más estándar…

“!Coño!, si es el mismo juego que jugamos nosotros… “

Un clásico pensamiento vanidoso de jugador pasa por mi cabeza.

“Yo podría haber jugado esa mano mejor” hace que me parta de risa de mi propio ego.

Llega el dinner break y los pros se levantan… por lo menos soy mas alto que Gus Hansen, aunque Huck Seed no solo me saca unos cuantos brazaletes y unos millones de banca, sino que también una cabeza y pico.

En el pasillo nos encontramos con Kokoliso, Armando y Germán. Koke lleva un sombrero de paja tejano y me dice que

“Ahora me llaman “Kokoliso Slim”.

Acaban de ver a Mena y Perico camino de ir a cenar algo antes de que empiece su satélite, así que nos vamos todos por el enorme pasillo en dirección a los restaurantes del Rio. Koke me comenta que ya están inscritos para el main event, y que él decidió jugar el día cuatro. Seguramente será el día más difícil de todos los días uno. Los dos primeros son en fin de semana, así que seguramente tendrán más “pescaos”.

Por lo que me comentan el nivel es alto, y nadie regala fichas por aquí, pero parece que tampoco es para estar preocupado. Distintos jugadores me dan impresiones distintas, así que habrá que ir recogiendo impresiones antes de pronunciarse sobre el tema.

Los restaurantes están a reventar en cada break, haciendo el comer un pequeño problema para los jugadores. Álvaro y yo habíamos cenado en un pub irlandés un poco antes, así que nos despedimos mientras ellos deciden irse a comer al indio “porque allí nunca hay cola”.

Al no ver a Mena y a Perico decidimos volver a las mesas. De vuelta reconozco la zona del pasillo en la que Amarillo y Doyle hicieron su carrera de carritos para minusválidos hace poco. Realmente el pasillo es largo…

Nos encontramos finalmente con Perico y Mena poco antes de que empiece su satélite. Aunque hay un montón de cosas interesantes que seguir en el Rio, estoy realmente cansado. Tizona y un servidor decidimos volver al Flamingo. Además hubo un problema con la acreditación de Álvaro y tenemos que enviarles por email una nueva foto. No deben de ser muy difíciles de contentar porque aceptaron la foto de Perico con las patillas de Elvis, o la mía de hace 7 u 8 años en la que tengo 15 kilos menos fácil…

Con todo son las 7:00 am… me voy a bajar a desayunar y tal vez me acerque al Bellagio a jugar unas manos.

Luego a hacer unas compras y para el Rio, que hoy sí que empieza el ultimo “donkament” de 1.500 $ y varios españoles van a jugarlo.

Un abrazo desde Las Vegas.

Seguimos en contacto…