La importancia de la selección de manos

Uno de los factores más importantes de un jugador
de póquer es tener unos buenos criterios de
selección de manos, ya que contra la creencia popular del
póquer Texas Hold'em de que cualquieras dos cartas pueden
ganar, la experiencia (y las matemáticas) nos demuestran que
una pareja de ases gana mucho más a menudo que un 7 y un 2.

Afortunadamente, este aspecto de selección de manos
iniciales es sobre el que probablemente más literatura de
póquer se haya escrito. Esto es así porque las
combinaciones de dos cartas que nos pueden repartir antes del flop, son
tan sólo 169 independientemente del palo, y de esas 169,
menos de la mitad son rentables a largo plazo y por lo tanto no son
jugables. De ese modo podremos hacer un análisis detallado
de las manos a jugar dependiendo de la mesa y la posición en
la que nos encontremos, que es lo que haremos en los siguientes
artículos. Antes expondré las bases que nos deben
llevar a ser selectivos con nuestras manos.

¿Qué tipo de jugador aspiramos a ser?

Loy Kriegger, en su libro More
Hold'em Excellence, comenta "la diferencia principal entre
un jugador que juega por diversión, y otro que juega por
dinero, es que el jugador recreacional busca razones para jugar manos
marginales, mientras que el que lo hace por dinero busca razones para
abandonarlas. Este jugador evitará peligros innecesarios, y
lanzará a la basura sus manos especulativas cuando la
recompensa potencial esté superada por los riesgos".

Obviamente nosotros queremos ser el segundo tipo de jugador.
Nuestra intención no es divertirnos. Nos divertimos ganando
dinero, y sólo lo podemos hacer si tenemos unos criterios
sólidos de selección de manos. Esto
evitará vernos involucrados en situaciones adversas con
manos que, en un primer momento ni siquiera deberíamos estar
jugando.

¿Cuantas manos deberemos jugar?

En principio el número de manos que jugaremos
vendrá determinado por nuestro nivel de juego, pero para que
os hagáis una idea, un buen jugador suele jugar el 15% de
las manos que le reparten. Cuanto menor nuestro nivel de juego,
más estrictos debemos ser, pues jugando más manos
entraremos en situaciones que no sabremos resolver. Por lo tanto, un
principiante debería jugar tan sólo sus mejores
manos, y de esa forma adquirir experiencia sin entrar a más
del 10% de los botes.

Es probable que oigáis durante vuestra vida el dicho de que
un buen jugador puede jugar muchas más manos
subóptimas antes del flop, por su maestría del
juego tras el flop. Si bien esto es cierto, conviene que no le
hagáis el más mínimo caso. Estamos tan
alejados del nivel de estos jugadores como de Marte. 

Jugar menos manos que nuestros rivales también nos
da una tremenda ventaja sobre ellos. En general, vuestras manos
serán mejores que las suyas en todas los botes en las que os
veáis envueltos. Vuestros colores serán mayores,
vuestras escaleras más altas, y vuestras parejas
estarán mejor apoyadas. ¿Os gustaría
ser él en esta situación? Seguro que no.

El mayor error que cometemos los jugadores de
póquer

Jugar demasiadas manos. Un grave error cuyas consecuencias a
largo plazo son demoledoras. Por una parte, la decisión de
elegir entrar o no en un bote, se da con bastante frecuencia (en cada
mano). Por lo tanto si continuamente entramos con manos que no merecen
la pena, las pérdidas a la larga pueden ser
inmensas. 

Por otra parte, y en menor medida, el entrar con una mala mano
suele ocasionar que te veas arrastrado a jugarla hasta el final. Por
ejemplo entrando con Q8 en última posición, y
ligando pareja de Qs en el flop, puede hacer que nos quedemos hasta el
river para vernos superados por otra Q con mejor apoyo.

Algunas de las causas por las que cometemos este error es
porque sobrevaloramos nuestras capacidades. Hemos oido leido que los
mejores jugadores juegan más manos y creemos que nosotros
también podemos hacerlo. Mentira y gorda. Sed realistas. Ese
dicho no nos incluye.

Otra de las razones que nos impulsan a jugar más
manos de las que debemos es la falta de paciencia y disciplina, sobre
todo cuando nos pasa una desgracia o llevamos una mala racha. En estas
situaciones es frecuente que empecemos a jugar manos que no
deberíamos, impulsados por la necesidad de recuperarnos
rápidamente. Es un error muy serio, pero de
difícil resolución, pues tiene implicaciones
psicológicas, además de que por el factor suerte
a corto plazo del póquer, son situaciones en las que os
veréis inmersos con cierta frecuencia. Conviene que
sepáis reconocer cuando estáis en este estado, y
volveros si cabe más estrictos con vuestros criterios de
selección para evitar males mayores.

Adaptarse o morir

Los criterios de selección de manos iniciales no
son monolíticos. Si así fuera, cualquiera
podría memorizarlos y convertirse en un gran jugador de
póquer. Sin embargo, aspectos como nuestra
posición, el número de jugadores dentro de la
mano, el tipo de rivales, agresivos o pasivos, son factores a los que
debemos adaptar nuestro juego antes del flop. 

En general, los límites bajos se caracterizan por
haber un gran número de jugadores pasivos en cada mano. Esto
es así porque vuestros oponentes no tienen idea de lo que
significa ser selectivo con las manos que juegan, lo que hace que la
mayoría de estos botes sean multijugador y con mucho dinero
dentro, por lo que nuestras odds
implícitas serán elevadas. En esta
clase de partidas, ganan valor las drawing hands y lo pierden las
cartas altas sin ligar pues difilmente en el river ganas con tan
sólo una pareja, aunque sea la mejor.

Si nos movemos en niveles medios/altos, lo usual es disputar
el bote entre 2 ó 3 rivales agresivos, y generalmente
subido, por lo que ganan valor las manos hechas y cartas altas, ligadas
o no, perdiéndolo las drawing hands como JTs. Tened en
cuenta que un raise por parte de uno de vuestros rivales indica una
gran fuerza, a la vez que reduce vuestras pot
odds, por lo que en general deberéis ser mucho
más estrictos con las manos que juguéis.

Nuestra posición
influye en el sentido de que cuanto más retrasados, mayor
información disponemos del desarrollo de la mano. Si el bote
viene subido o no, si han entrado 8 ó 1 oponentes, son
factores determinantes a la hora de decidir entrar con una mano como
JTs.

Conclusión

Espero que hayás comprendido cuán
importante es ser serlectivo con las manos que jugamos antes del flop.
Es una decisión que realizaremos tan a menudo, que no tener
unos criterios bien definidos puede hacer que perdamos una considerable
cantidad de dinero a lo largo del tiempo. 

Hemos evaluado también el tipo de jugador que
debemos aspirar a ser, y visto que cuanto menor sea nuestro nivel
más estrictos debemos ser con las manos que jugamos.
Además hemos advertido que el error más grave que
cometemos los jugadores de póquer, es ir a más
manos de las que debemos, y para concluir hemos observado como nuestros
criterios se deben adaptar a la mesa en la que juguemos.

Con todo esto en mente ya podemos pasar a los artículos
donde sugiero unas guías de selección de manos
según sea vuestra posición en la mesa.

• Selección
  de manos, primeras posiciones
• Selección
  de manos, posiciones medias
• Seleción
  de manos, posiciones finales
• Selección
  de manos, en las ciegas

Cualquier duda, ya sabéis. Un saludo y hasta la
próxima!