PokerFull TiltStars, la sombra alargada

A falta de rubricar las montañas de documentos que un acuerdo de ese calibre requerirá, los datos parecen indicar que la bomba informativa en forma de rumor que estallaba ayer, martes 24 de abril (bautizado en Twitter como #RedTuesday), tiene todos los visos de convertirse en noticia en breve: PokerStars estaría dispuesta a comprar Full Tilt Poker con el beneplácito del DoJ.

Tras meses de negociaciones con el Departamento de Justicia de Estados Unidos (DoJ), los inversores  franceses del Groupe Bernard Tapie no han logrado cerrar la compra de la que, hasta su cierre el 29 de junio de 2011, era la segunda sala de poker online más importante del mundo. Según las informaciones que se vienen publicando desde el día de ayer, el truculento plan de los Tapie para devolución de fondos a los jugadores, congelados desde que Full Tilt cesó su actividad y prioridad para la Justicia estadounidense, habría ralentizado la negociación, un hecho que PokerStars habría aprovechado para poner una oferta sobre la mesa mucho más interesante a ojos del DoJ.

Demos por hecho que el acuerdo finalmente se cerrará (aunque si ahora mismo me dijeran que un Jesús Gil resucitado reaparece junto a Elvis Presley para entorpecer la operación, gracias a una inyección de capital vía bonos de Nueva Rumasa, tampoco me extrañaría tanto) e intentemos analizar qué es lo que se puede traducir de esta operación.

¿A quién beneficia?

Los jugadores con fondos en Full Tilt Poker. Sin ni siquiera conocer cuáles eran las supuestas verdaderas intenciones de los Tapie para entorpecer la retirada de depósitos en FTP tras su adquisición y reapertura, la opción de una gestión de FTP por parte de PokerStars parece mucho más adecuada para los intereses de los antiguos usuarios de FTP.

PokerStars demostró tras el Black Friday una eficaz administración y la suficiente musculatura financiera para devolver todos los fondos a los jugadores estadounidenses, encajar la pérdida de una cuota de mercado muy significativa y, aún así, seguir manteniendo su negocio. Personalmente, no me cabe duda -y probablemente tampoco al DoJ- de que los jugadores de Full Tilt tendrán muchas más facilidades para recuperar su dinero, si así lo desean, bajo una la gestión de PokerStars que en cualquier otra circunstancia. PokerStars es una empresa de poker, a la que le gusta el poker, que entiende a los jugadores de poker y que quiere hacer que el poker sea un negocio sostenible a largo plazo para ellos. El Groupe Bernard Tapie no sabemos lo que es.

El Departamento de Justicia de Estados Unidos. El DoJ tiene desde hace meses una patata caliente en forma de millones de dólares de los jugadores de poker estadounidenses -a quienes nunca han considerado culpables de nada- bajo su tutela. El objeto de la Justicia no es administrar dinero sino justicia, y lo justo es que los usuarios, hasta ahora los máximos perjudicados por la situación, puedan recuperar su dinero. Cuando intervienen FTP no parece que hubiera demasiado de eso por allí y la opción Tapie se revela ahora con demasiadas aristas. Si PokerStars ha llegado ahora con una oferta que incluye el dinero suficiente para hacerse cargo de esa deuda sin demora, al DoJ le han solucionado un problema. Y claro, si me solucionas un problema...

PokerStars. Por el momento, con esta maniobra están lanzando varios mensajes. El poker es nuestro negocio, tenemos la suficiente solvencia económica como para afrontar la operación y el DoJ se fía de nosotros. Con esta blocking bet desactivan una opción competidora que, no me cabe ninguna duda, percibían con cierta preocupación. El mercado mundial del poker online está en un época de grandes turbulencias y la reaparición de un actor de relumbrón en el escenario no debía hacerles demasiada gracia. Asunto solucionado. Por el camino, consiguen además tender puentes con la Justicia de Estados Unidos con la que tienen pendiente la gran causa del Black Friday en la que se les imputan importantes cargos. A día de hoy, la idea general es que PokerStars acabará resolviendo ese asunto con un muy importante acuerdo económico -al igual que en su día lo hicieron Neteller (155 millones) o PartyGaming (300 millones)- y cualquier colaboración con el DoJ es, evidentemente, una buena idea.

Ray Bitar y Nelson Burtnick. Por ahora son los únicos imputados de Full Tilt Poker por el caso Black Friday. Cualquier desatasque en la situación de la empresa tiene por fuerza que ser percibido por ellos como beneficioso.

Los trabajadores de Full Tilt Poker. Entendemos que PokerStars no querrá desaprovechar buena parte del capital humano que hizo de FTP una gran sala de poker online y que contratará nuevo personal para reflotar la compañía.

¿Y los perjudicados?

¿La competencia? Estamos seguros de que con el bombazo de ayer seguramente no se descorcharon botellas de champán en las oficinas de bwin.party, 888, o Playtech. La idea de una empresa dominando las que hasta hace un año eran las dos salas que se merendaban el pastel no debe ser especialmente agradable si tienes que competir contra ellas. Pero vayamos un poco más allá y veamos qué es lo que ha ocurrido en el mercado, a grandes rasgos, desde el Black Friday.

Con la desaparición de Full Tilt Poker y con un mercado internacional que da muestras de empezar a contrarse, PokerStars asumió buena parte de los jugadores de FTP pero también PartyPoker y otras redes se beneficiaron de ello. Con el regreso de Full Tilt, es de prever que buena parte sus antiguos usuarios regresen y esos usuarios serán en su mayor parte jugadores de PokerStars porque el trasvase se revertirá. La diferencia es que ahora PokerStars tendrá que asumir los costes de la compra y mantener la operativa de dos salas con el dinero que antes tenía para una. En definitiva, durante el último año, al mercado global no han llegado grandes cifras de nuevos jugadores que ahora pueden mudarse de otras sala a la nueva FTP. Lo que había es más o menos lo que hay por lo que el punto de partida será similar al de abril de 2011.

Ahora les tocaría a los competidores avanzar en la senda de la mejora general de sus productos y estrategias para poder arañar terreno a las dos grandes. Ejemplos los hay. Y varios. El poker online es muy joven y el mundo muy grande, con muchos mercados potenciales aún frescos. En unos años seguro que la industria tiene un aspecto muy diferente al que presenta hoy en día.