La impresionante lista de activos embargados a Ray Bitar

El ex-director de Full Tilt Poker, Ray Bitar, ha recibido notificación desde la corte federal de que sus activos van a ser embargados, como parte del proceso judicial que hay abierto contra él por sus responsabilidad en los delitos que llevaron al cierre de la sala en el Black Friday.

La lista de bienes, que recogemos de FlushDraw.com, incluye 18 cuentas bancarias, 7 propiedades inmobiliarias, 9 participaciones en empresas y sociedades y sus intereses como propietario en 24 empresas relacionadas con el grupo Full Tilt Poker.

Las cuentas bancarias de Bitar se repartían entre Guernsey, Irlanda, Malta, Alemania y Estados Unidos.

Las propiedades inmobiliarias son su mansión de 3 millones de dólares de Glendora, California, varias casas unifamiliares en Glendora y Tere Haute, Indiana, un almacén valorado en un millón de dólares y el uso y disfrute de las instalaciones una exclusiva comunidad de golf en Bermuda durante cinco semanas al año, que le costaba unos 400.000$.

Las inversiones más llamativas de Bitar eran una productora cinematográfica en la que era socio de Chris Ferguson y una participación en  PASG LLC, la empresa que publica el conocido Hold'em Manager.

El tema de los intereses en negocios del grupo se remonta a una decisión acerca de la estructura de la empresa. Para facilitar el traspaso a PokerStars, varias compañías de las que el único beneficiario era Ray Bitar fueron transferidas a Tiltware y Pocket Kings, mascarones de proa del grupo y los documentos de transferencia tienen que ser modificados ahora a favor del gobierno estadounidense.

Estos embargos están relacionados con los cargos criminales de los que Bitar se ha declarado culpable por fin la semana pasada. Bitar ha trasladado al juez un diagnóstico médico que recoge una cardiopatía que requiere de un trasplante de corazón para salvar su vida, que ha sido lo que le ha impulsado a llegar a un acuerdo con la fiscalía y la que le ha salvado de ser encarcelado.

La juez Preska indicó expresamente la necesidad del trasplante de corazón de Bitar como factor decisivo en considerar el tiempo ya cumplido de prisión y arresto domiciliario como suficiente, ya que el sistema correccional no podría proveerle los cuidados necesarios y la condición de convicto le haría ineligible para el transplante, lo que equivaldría a una condena a muerte.