Full Tilt Poker niega ser una estafa piramidal

Full Tilt Poker ha remitido un comunicado "en exclusiva" para PokerStrategy en el que rechazan las acusaciones de la Fiscalía de Nueva York. Desde hace unos días, Strategy parece haberse convertido en el portavoz oficial de la sala, no en vano al final de la noticia una leyenda dice, "Permanece en sintonía para los próximos comunicados de Full Tilt Poker".

Esta es la traducción del comunicado.

Full Tilt Poker no es un esquema de Ponzi.

El 19 de septiembre, el Departamento de justicia emitío un comunicado afirmando que FTP era un esquema de Ponzi. Mientras el gobierno discrepa de las actividades subyacentes de FTP, bajo cualquier interpretación razonable, no hay manera de caracterizar esas operaciones como un esquema de Ponzi.

Un esquema de Ponzi es un fraude a inversores que incluye el pago de supuestas devoluciones a inversores ya existentes a partir de fondos contribuidos por nuevos inversores. Los esquemas de Ponzi no contemplan ninguna inversión legítima, sino el uso de los fondos de los nuevos inversores para pagar "dividendos" a los inversores iniciales.

Pese a los eventos recientes, FTP sigue comprometida a identificar un inversor adecuado y devolver la totalidad del dinero a sus jugadores.

Sin decir nada nuevo acerca de las que se han revelado como muy adelantadas negociaciones con un grupo inversor francés, Full Tilt simplemente decide meterse en una guerra semántica con la fiscalía de Nueva York.

Es cierto que el uso de esas palabras por parte del DoJ provocan un daño innecesario a FTP y a la imagen del poker en general, sobre todo teniendo en cuenta que en los papeles, en la demanda presentada ante el juez, no se hace referencia alguna a la existencia de ese esquema Ponzi en las operaciones de Full Tilt.

FTP ya había iniciado esta discusión a través de los abogados de alguno de los implicados, intentando minimizar el impacto de las palabras del fiscal.

Acerca de las negociaciones con los supuestos inversores, el silencio de la AGCC, supuestamente en conversaciones directas con los interesados para informarse de las últimas reuniones programadas para el fin de semana, es muy significativo.

El daño a la imagen del regulador tras las últimas actuaciones del DoJ si no se mostraba enérgico con FTP podría ser enorme, y el hecho de que en más de una semana no se haya decidido a revocar la licencia de FTP es una muestra bastante reveladora acerca de la seriedad de las negociaciones con el grupo inversor.

La posible revocación de la licencia parece ser el mayor impedimento para el cierre de la operación, siempre según las palabras de los abogados de FTP. Parece una medida de presión a la AGCC para mantener abierta la posibilidad de una virtual devolución de la licencia de juego a la sala.

Lo que no parece discutible es que esta es la última posibilidad de que Full Tilt se salve y la mejor oportunidad de que los afectados recuperen su saldo en la sala. Es de agradecer el tiempo que se está tomando la AGCC para asegurarse de tomar una medida que ayude a que todo termine de la mejor manera posible.

Los últimos rumores acerca de que la venta de FTP fuera ya un hecho no parecen ser ciertos teniendo en cuenta que están pendientes todavía las reuniones entre los inversores y la AGCC para asegurarse de la validez de la licencia, que tendrán lugar este viernes o el próximo lunes como muy pronto.