EPT Barcelona Super High Roller 50K: Vitaly Lunkin se hace con el título

Quizá no era el nombre de más relumbrón. Muy probablemente no realizó el juego más espectacular. Y tampoco fue el que más premiums levantó preflop. Pero al cerrar el telón de este Super High Roller de 50.000 euros de entrada, el trofeo y los 711.300 euros eran suyos.

Por el camino se quedaron sus 7 rivales. La eliminación que más tardó en llegar fue la primera. La que marcaba la burbuja. Seidel pagaba el allin de Timothy Adams con  Qc Qh que empujaba sus apenas 11 ciegas con  Ks 9s. En el flop aparecía el rey de Adams, pero también dos tréboles, que junto con el  Tc y el  3c del river daban color a Seidel que eliminaba al canadiense y se salvaba de una más que probable eliminación, ya que se hubiera quedado con apenas 5 ciegas. Adams se iba del torneo sin pasar por caja.

A partir de aquí la acción cambió la marcha y la fase de "amarre" pasó al olvido. Pocas manos más tarde Fabian Quoss, otro de los jugadores con menos puntos se restaba ante la apertura de McDonald, que con  Ac Kc despachaba al alemán que presentaba  Ks Qs, aunque no sin sufrimiento. El flop traía su as, per venía aompañado de dos picas, que junto a la  Jd del turn hacían que Quoss no perdiera la esperanza. Esta vez el river no obraba el milagro y nos quedábamos con 6 jugadores en juego. El alemán se llevaba 128.515€ por su torneo.

Mike McDonald y Ole Schemion pugnaban por el control de la mesa, esperando a que los jugadores más cortos movieran fichas. En una guerra por el control, el austríaco perdía comba ante "Timex" que se destacaba en la clasificación. Esta nueva situación acabó con Ole Schemion. Poco más tarde y tras varios intentos de robo, "WizoWizo" se restaba con  4c 4h en una mano abierta por Steve O´Dwyer que pagaba encantado con sus  Ad As. Nada salvaba a Ole, que sucumbía en sexto lugar por un premio de 159.200€.

El Nomvember Nine David Benefield caería poco más tarde, ya estando muy corto ante Lunkin, que poco más tardería asestaría su primer golpe de mano. En uno de esos flops macabros, Mike McDonald se veía contra las cuerdas. Había abierto  Kd Qd en primeras posiciones y las ciegas, Lunkin  6h 6c y O´Dwyer  Ks Jc pagaban. Las tres primeras cartas fueron definitivas.  Qc Qh 6s y el canadiense finalizaba su participación en este Super High Roller llevándose 269.400€.

Quedaban 3 jugadores y el liderato del ruso era escandaloso. O´Dwyer y Seidel se batían el cobre para salvar un salto de premios de casi 200.000 euros. Tras varias batallas entre ellos, con Lunkin esperando rival para el duelo final, Seidel recibía una bonita pareja de ases. Era la tercera vez seguida que el americano atacaba una apertura del irlandés y esta vez O´Dwyer decidía pagar con su  Ts 9s. En el flop aparecía un diez, una jota y un proyecto de color de diamantes, suficiente para que la trampa de Seidel se cerrara en los morros de Steve, que empujaba todas sus fichas al centro. Con el call de Seidel, el heads up estaba servido y O´Dwyer se llevaba un premio de 355.100 euros.

Seidel entraba líder al duelo final y su ventaja fue in crescendo hasta poner el torneo de Lunkin en riesgo. El ruso se restaba con A7 ante las damas del ya tercer jugador con más ganancias en vivo de la historia. La lucha continuaba y Vitaly le daba la vuelta al duelo justo antes de un descanso muy necesario para el ruso, que parecía no tener soluciones ante el juego de Seidel.

Tras la pausa la dinámica cambió y Lunkin metió una marcha más. Esto descolocó a un Seidel que empezaba a perder puntos de manera preocupante ante la novedosa agresividad de Vitaly, que arrinconaba a Seidel hasta que el americano se doblaba con A9 que ligaban full ante las QQ de Lunkin.

Pero no fue suficiente, la táctica de botes pequeños no fue suficiente y tras varias manos que volvían a tener el sabor del vodka, Seidel pagaba el envite de Lunkin. El ruso mostraba  Ac 5h por el  Kd Qc y un as en el flop ponía el cierre a una mesa final plagada de estrellas. Lunkin era el ganador.

Así quedaba la clasificación final: