El Departamento de Justicia se dirige a los jugadores de Full Tilt

El comunicado, colgado en la página oficial del Departamento de Justicia, dice lo siguiente:

Tras la presentación el 22 de septiembre de 2011 de la demanda civil modificada Los Estados Unidos contra PokerStars et al., 11 Civ. 2564 (LBS), la Oficina del Fiscal del Distrito Sur de Nueva York recibió cierta cantidad de preguntas por parte de individuales acerca de la recuperación de sus fondos en FTP.

A manera de recordatorio, en abril de 2011, esta oficina llegó a a un acuerdo con FTP para el uso de su dominio. Ese acuerdo, entre otras cosas, autorizaba expresamente a FTP a devolver los fondos destinados a los jugadores a sus jugadores. Sin embargo, y como se alega en la demanda modificada del 22 de septiembre, FTP no tenía a su disposición fondos separados para sus jugadores. En vez de ello, la demanda modificada alega que FTP había, entre otras cosas, (a) transferido significativas cantidades de depósitos de dinero real de sus jugadores a directivos de la compañía, mientras (b) permitía a muchos jugadores continuar apostando, “ganando” y “perdiendo”, con créditos fantasma en sus cuentas.

Ahora, esta Oficina, junto al FBI y otras agencias, está intentando localizar, asegurar y recuperar tanto como sea posible de los fondos desviados en el fraude cometido por FTP y su directiva indicado en la demanda modificada. La Oficina también está intentando obtener y examinar los libros y actas de FTP. Muchos de esos libros y archivos se guardan en el extranjero. Es posible la devolución de los fondos congelados a las víctimas del supuesto fraude, pero dependerá de varios factores, incluyendo el final del litigio con éxito, la cantidad de dinero incautado y embargado por orden del juez y el cumplimiento de los procesos que pueda establecer el DoJ acerca de la devolución de fondos embargados a víctimas que perdieron su dinero como resultado de una supuesta conducta fraudulenta.

No podemos predecir la duración de los procedimientos de este caso, sólo constatar que tardará muchos meses como poco. Informaremos a las víctimas del supuesto fraude de futuros sucesos de manera apropiada.

La información general acerca de lo que se conoce como “remisión” (es decir, devolución a las víctimas) de fondos que han sido embargados se recoge en el reglamento de DoJ, C.F.R. 28 Parte 9.

Es importante recalcar que este comunicado abre la posibilidad de que el Departamento de Justicia, si gana la demanda y se cumplen el resto de requisitos, sea el que termine devolviendo el dinero a los jugadores.

En el comunicado de la AGCC en el que se explica el proceso de de liberación que llevó a la revocación de tres de las cuatro licencias de FTP, se señala una cantidad de 331 millones de dólares como el total de fondos congelados por el DoJ desde 2007.

Esta cantidad estaría muy cercana al total de la suma de los fondos ahora mismo retenidos en FTP. Y faltaría saber cuánto dinero más se localizaría tras la inclusión de Howard Lederer, Chris Ferguson, Ray Bitar y Rafe Furst en al demanda civil y la posterior decisión del tribunal de embargar sus cuentas.

El problema reside en que si bien el Departamento de Justicia es un órgano federal, las fiscalías de distrito actúan a nivel estatal. Parte de los fondos congelados antes del Black Friday son producto de actuaciones de fiscalías como la de Maryland, que no tiene el mismo concepto acerca de los jugadores que utilizaban los servicios de FTP, a los que ve prácticamente como criminales.

Por tanto, ni es seguro que devuelvan el dinero ni que en caso de hacerlo lo hagan en su totalidad. Ni siquiera se puede aventurar si una posible multa que se embolsaría el gobierno estadounidense no tendría prioridad ante las deudas con los usuarios de FTP.

También sería interesante saber si, en caso de que se llegue a la decisión de devolver aunque sea parte de los fondos, los jugadores del resto del mundo son considerados iguales a los estadounidenses a ojos del DoJ. Un jugador canadiense ha posteado en 2+2 diciendo que ha preguntado al DoJ, vía correo electrónico, y la respuesta ha sido afirmativa.